Críticas de Espectáculos

Exquisita Puesta en Escena de Kado Kostzer.

Una hora de magia teatral.

Con una sagaz y audaz puesta en escena, Kado Kostzer logra entretener al público desde el principio hasta su desenlace trayendonos los mejores géneros musicales de los repertorios más destacados del ´50 al ´70 acompañado con excelentes actores y voces deslumbrantes.

"La Hora Italiana" o L´ora Italiana, tiene como atractivo, además de las excelentes actuaciones del elenco, las voces de Paula Castignola y Ramiro Hueyo que logran atrapar de manera constante y entretenida al público. Lo interesante de éste espectáculo es la reminiscencia italiana: cuando se da inicio a la obra, una proyección fílmica de grandes personalidades de la década del 50, 60 y 70 nos envuelve y nos invita a ser parte de aquel recuerdo clásico de la época, luego una desopilante comedia invade la sala y nos trae las dos voces que nos enamoran y nos entusiasma.

La trama transcurre en un estudio de radio que transmite por FM: "L´Ora Italiana" conducido por el simpático y afectuoso Loris de Martinolli (Julio López) y la admirable y encantadora Wanda Minetti (Ana María Casó), acompañados por los músicos Sebastián Rossi (Augusto Iacono) y Rocco Pizzarello (Julio César Vita) y los cantantes Silvana Baldi (Paula Castignola) y Mauricio Mariansky (Ramiro Hueyo) se juntan para realizar el periódico trabajo para sus oyentes. Pero llamadas telefónicas de simpatizantes y enemigos logran divertirnos y sumergirnos de manera constante. La cantante Silvana Baldi (Paula Castignola), hechizada con un comportamiento a la de una "princesa" solo podrá ser curada con el verdadero sentimiento del amor.

La puesta en escena saca el máximo provecho a una actriz sumamente dotada (hablo de Ana María casó) quien gratifica una experiencia estética admirable como intérprete.
Julio López (que actuará en "Relojero" de Armando Discépolo el próximo 21 de Septiembre), vuelve a dar prueba de su ductilidad artística que asume con extraordinaria interpretación. Gestos y poses muy bien logrados.
Paula Castignola brilla con su sensualidad y voz que agradan al público y encantan mientras que Ramiro Hueyo logra conmocionarnos con la fuerza vocal, una conjunción perfecta entre los dos tono de voz que llaman la atención y enriquecen nuestros sentidos.
Tanto Augusto Iacono como Julio César Vita actúan de manera sutil y bien realizada como lo exige su personaje.

No se puede descartar la escenografía y el vestuario que realzan la figura de manera predecible y proponen soluciones que descubren o acentúan la teatralidad del texto con hallazgos que evidencian su minucioso y fructífero estudio del material intelectual. La conjunción de la plasticidad, los gestos, las situaciones inesperadas en un hilo constante logran maravillar permanentemente al público con todo el glamour de quienes dan por hecho un trabajo artístico y técnico impecable.

En cinco palabras: una hora de magia teatral.

Calificación: Excelente